DESDE ARGENTINA, CON NUEVA SIÓN – Nuestro colaborador Gustavo Efrón, director del periódico Nueva Sión, atiende a nuestros micrófonos la misma semana en la que el juez Daniel Rafecas ha sorprendido a propios y extraños al desestimar este jueves la denuncia presentada hace dos semanas contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por el fiscal Gerardo Pollicita, heredero de la acusación formulada por Alberto Nisman antes de morir. Sin embargo, Efrón ha decidido enfocar el asunto desde un particular punto de vista: el de la reivindicación de un análisis complejo de una realidad compleja, alejado de maniqueísmos reduccionistas; tal y como explica él mismo: «No voy a hablar específicamente de lo de Nisman, en lo investigativo-judicial etc. Voy a partir de este tema crucial de hoy para tomarlo como disparador para hablar de la guerra discursiva, de la guerra de trincheras en la que está sumergida la disputa político cultural de la Argentina de hoy. Donde no parece haber medias tintas, donde rige el «de que lado estas» y todo debate se reduce a argumentaciones y contraargumentaciones en base a posicionamientos previos ya definidos y fosilizados. Hoy el Juez Rafecas fallará como falló, y esto no cambará un ápice la manera de ver la cuestión en quienes ya condenaron de antemano a la Presidenta. Lo mismo ocurre en el caso inverso. Y en la comunidad judía, esta lógica se reproduce cabalmente en este caso«.