UNIDOS CON (JACOB) ISRAEL – Finalmente se produjo el cambio de gobierno más esperado y tortuoso en la historia de Israel, con la jura como Primer Ministro de Naftali Bennett en reemplazo de Benjamin Netanyahu. Una coalición imposible de extremo a extremo del arco parlamentario cuyo principal aglutinador era sacar de la jefatura de gobierno a Netanyahu lo ha conseguido con la alianza de unas fuerzas que, de haberse convocado nuevamente las elecciones estos días, habrían desaparecido en más de un caso. Pero, a la debilidad de esta apuesta de cambio hay que contrarrestar una debilidad aún mayor de la oposición, como ha podido vislumbrarse en la sesión de este domingo en el parlamento. El «mago» de la política ya no encandila y se ha volcado a un discurso agresivo e inerte. Se abre una nueva etapa, de la que se desconoce casi todo.