DESDE EL FRENTE – Volvemos a convocar al politólogo uruguayo-israelí Alberto Spektorowski, profesor emérito de la Universidad de Tel-Aviv, para hablar en esta ocasión de las sorprendentes declaraciones de Trump y de Hamás en las últimas horas, que vuelven a plantear salidas (no sabemos si reales o no, pero sin duda alguna, sorprendentes) a la situación de un frágil alto el fuego a punto de romperse (o no) que podría desembocar en un escenario mucho peor o mucho mejor, según cómo se mire y desde qué perspectiva. La interrupción del intercambio de secuestrados por presos por parte de Hamás ha abierto las puertas de una dimensión desconocida, para que el presidente estadounidense (recordemos que no hace ni un mes al frente del país) plantee desde el éxodo voluntario de los gazatíes a Egipto y Jordania y el establecimiento en Gaza de una zona turística dirigida por EE.UU., a un escenario de destrucción total, difícil de asumir para Israel que aún tiene decenas de secuestrados con vida retenidos allí. Se trata de un juego radicalizado al extremo, que ha llevado a Trump a postular un callejón sin posibilidad de marcha atrás.
