HUELLAS – Seguimos añadiendo apellidos con un posible origen judío, fruto de las investigaciones de Manuel Sanvicente, como Masip, Esmies y Cardona.

MASIP

Massip (derivado del latín vulgar «mancipus») hace referencia al trabajo que tenía la primera persona que se llamó de esta forma. Massip equivale, en castellano, a “mancebo». Puede significar, también, «siervo de un señor». Apellido de los judíos conversos de Mallorca, llamados «chuetas». Espacio geográfico: Francia, España, Suiza, Bélgica y Argentina.

ESMIES

Apellido hispanojudío derivado de «mies o mieses»: fruto maduro, campo cultivado de cereales, recolección. Tiene connotaciones religiosas. La referencia más antigua que se tiene de Esmies data de 1366. Issach Esmies vecino de Gerona (Cataluña). Esmies también era apellido de los judíos de Portugal. Esmies es variante de Mies. Por tratarse de un apellido minoritario, no hay datos de su ubicación geográfica en el mundo.

CARDONA

El linaje catalán de los Cardona comienza con el matrimonio de Ramón Folch y Argencia, hermana de Carlomagno. Tiene su origen directo en la Casa Real de Francia. Sus descendientes formaron parte de la nobleza, el alto clero y «familiares de la Inquisición» en España. Judíos y conversos, de la villa de Cardona (Cataluña), tomaron por apellido el nombre de la localidad, según costumbre, así como los chuetas de Mallorca. De la familia Cavaller era Joan de Cardona, judío converso que en 1492 adoptó este nombre. Los sefarditas conservan numerosas variantes del apellido Cardona: Cardon, Cardini, Cardina, y Carden. Forzados a la conversión siguieron guardando la fe mosaica, por este motivo la Inquisición persiguió a los nuevos cristianos Cardona en España, Colombia y México. Espacio geográfico: España, Argentina, Francia, Estados Unidos, Australia e Italia.